jueves, 31 de enero de 2013

Tres historias de domingo: FELIZ AÑO NUEVO CHINO

La alianza de civilizaciones (GLH)

Doscientos metros después de cruzar las puertas de dos inmensos dragones en Chinatown, encontré a un nutrido grupo de chinos alrededor de un par de locales. Delante de los mismos tenían varias mesas con grandes bandejas de comida.

Turista caucásico (GLH)

Políticos españoles en tumbona
 Una de las claves de viajar solo, es que como no tienes con quien hablar ni nadie que pase verguenza ajena, te da igual pararte, preguntar y ser tu mismo. Sin duda es una de las formas más puras de visitar cosas y conocerse. Así que me puse a investigar. Primero pregunté a un par de tipos de mediana edad, pero creo que les superaba con mi nivel de inglés de la Logse (creo que llegué a recibir clase  durante un par de años). No hubo mucha comunicación entre nosotros.

Delante de la celebración, habían dispuesto un par de docenas de sillas acolchadas donde había algunos individuos sentados comiendo o simplemente charlando entre ellos. En la última fila había un chico joven. Era mi presa perfecta, seguro que sabía decir el ‘guan chu tri’ y hasta el nombre del presidente. Mi última esperanza para meterme en el festejo.

Y tuve suerte. El muchacho tenía idea de la lengua, 19 años, se llamaba Wii (como la mierda esa con mandos que te hacen sudar y mandar caparazones en el Mario Kart que tanto echo de menos), había trabajado en recursos humanos en el ejército americano y ahora estudiaba en la universidad.

Políticos en misa de 11
Rica y fría comida por la patilla
Me explicó que según él, no profesaban ninguna religión. Sin embargo, tenían toda la pinta de budistas. Wii me contó que hacían ofrendas para la buena suerte. Habían asado 5 cerdos descomunales. Muy crujientes, con una mezcla de especias imposible de descifrar. Estaban jugosos y una señora (que resultó ser la madre de la consola de Nintendo) me sirvió lo que decía que eran las mejores partes. Además la gente se llevaba cargamentos y cargamentos de comida de la allí preparada a su casa en grandes cajas de cartón. Muy higiénico.

Probé varios tallarines, un pollo que había y el arroz. Había palillos y cubiertos, le pregunté a mi colega qué usaba. Y me confesó que ambos. Suelo ser un intrépido aventurero, pero en este caso, comiendo de pie, fui un conservador. Cuchara como los bebés y como la mayoría de los asiáticos que allí se congregaban.

Y como no hay homeless en LA, se me volvió a acercar uno. Este tenía bigote (pero no era mexicano) y al pobre le faltaban varios dientes. Iba aseado pero apestaba a alcohol. Me tiró mientras hablaba algún que otro felipe de un tamaño descomunal. Pero no necesitaba una segunda ducha. El hombre me escuchó que trabajaba en medios audiovisuales y como yo encontré a Wii para satisfacer mi curiosidad, él intentó que le explicara el funcionamiento de las cámaras de vídeo digitales. Y claro, no se quedó muy convencido con lo de las tarjetas y los ceros y unos. Pero mi ingeniería no da para más.

Intercambié teléfono y redes sociales con Wii. Un gran anfitrión para un gran año nuevo que nos espera. Japi niu chinese yir.

Fin de las historias de domingo.

Hasta la siguiente desde... Downtown (el centro de LA)!!!!

miércoles, 30 de enero de 2013

Tres historias de domingo: NARCÓTICOS ANÓNIMOS

La Florida, detrás el Canciller (El Pueblo de LA)

En el centro de Los Angeles (Los Angelitos como dice una prima mía), hay una placita que recuerda al antiguo Pueblo de Los Angeles antes de formar parte de este país libre. Cuatro casas de 1800, un kiosco, una iglesia metodista y otra católica.

En una de las casas que estaba en una calle llena de mercadillos mexicanos con comida típica del país vecino, encontré un pequeño museo gratuito donde se enseña la casa más antigua de la ciudad hecha de adobe. Reconstruida por los millones de terremotos que hacen ‘bailar salsa’ a la ciudad, está decorada con objetos de época. Nada elegante. Una casucha de pueblo viejo de 1800 y poco.

Después de tragarme parte de un video explicativo sobre la historia de la urbe, recorrí la villa decimonónica con su patio y las cuatro habitaciones, como debe ser, en el sentido opuesto de la visita.

La chabola de la historia (GL-H)



Justo al final, que bien podría ser el inicio real, había un turista español hablando con un señor campechano hablando en castellano y una guía que enseñaba la exposición. La tipa me preguntó de dónde venía. Me comenzó a contar la historia de la casa en un español macarrónico con dejes de Galavisión. Seguramente ellos piensen que mi inglés es igual de malo que el de Antonio Banderas, pero con interpretaciones más creíbles.

A la conversación se unió el hombre sentado con gorrito, de unos 50 y varios años, bien cascados. Parecía del museo al estar sentado en una silla al lado de los donativos y hablando como si no pasara el tiempo.




Durante unos diez minutos, tuve una de las charlas más raras de mi vida. Estaba hablando sobre qué visitar con la tipa y el tipo a dos bandas. Ella me pasó un mapa de la ciudad y me señaló lo destacado, Mientras el otro, me incitaba a que fuera con ella de museos y que le invitara a comer (a las once de la mañana). Mientras entraban y salían visitante y hablaban con la guía.

Con el hombre estuve hablando un buen rato sobre la vida y la sociedad. En diferentes idiomas. Español, francés, italiano, inglés... Daba igual, saltábamos de una lengua a otra como unas ranas entre nenúfares. El tipo insistía delante de la muchacha que era una chica muy guapa (va a ser que no) y que flirteáramos. En el fondo yo lo que creo es que él quería cepillársela.

Entre la tontería la tipa sacó un sello para niños en el que nos condecoró la mano como historiadores junior de la ciudad de LA. Ya me habían dicho que el nivel educativo era bajo, pero por lo visto en lo que te tomas un perrito caliente te puedes volver historiador, abogado o taxidermista.

El hombre, que se había levantado por el sello, resultaba un pobre homeless. Un vagabundo con idiomas, para conocer los guetos de medio mundo. El hombre pidió que le pusiera un sello también en su calva frente al quitarse el gorrito.

Pasados un par de minutos, la tipa se fue a comer y me dió su tarjeta de visita, mientras yo me quedé con mi nuevo ‘amigo’. Mi amigo me contó que tenía que ir a una reunión de narcóticos anónimos y alcohol. Podía haber sido un buen momento para cumplir mi must de una reunión de adictos, no era el momento ni el lugar. Al rato me dijo que teníamos que hablar. Me olía a que me quería pedir dinero y me fui con la excusa barata que había quedado con un amigo. A la media hora me lo crucé al tipo en bici y me saludó. No me guardaba recor.


Fin de la segunda historia de domingo.

Historiador, mañana taxidermista

martes, 29 de enero de 2013

Tres historias de domingo: Desayuno con diamantes


Los ricos diamantes insanos
Un domingo cualquiera, tuve que madrugar. El día fue largo, con multitud de detalles que no vienen al caso. Sólo tres historias de domingo. Pinceladas angelinas, instantes curiosos. Tres relatos de realidad: Desayuno con diamantes, Narcóticos Anónimos y Feliz año nuevo chino.


DESAYUNO CON DIAMANTES (en forma de chocolate)

Me levanté hambriento y todavía no he comprado comida para mi casa. Así que me dispuse a desayunar en la típica tienda de donuts y bagels que tengo cerca de mi casa, junto a un 7/11, un japo de franquicia hiper barato correcto, una tintorería y un Subway (la guarrada esa de mediasnoches con mayonesa).

En la cafetería/donusería, me pedí un par de rosquillas de esas pequeñas ultrabaratas y una buena botella de agua embotellada. La dueña que regenta el local es una asiática (yo diría que japonesa) que habla un inglés complicado pero que se desenvuelve con facilidad hablando español latino, lengua que usan muchos de sus clientes.

A primera hora de la mañana, varios mexicanos tuvieron una discusión teológica de gran altura. Hablaban sobre los homosexuales. Para ellos era algo casi peor que matar. Pero diferenciaban. Los gays que se hacían y los que se hacían estando rodeados de niñas. Hablaban que era cosa de hormonas masculinas y su falta o exceso de ellas. Que si tienes demasiadas masculinas y no tienes femeninas, te gustan los hombres. Casi mejor que las manzanas y las peras de alguna alcaldesa...

Yo me descojonaba. Y con mi cara de caucásico, nadie piensa que hablo la lengua de Cervantes. Seguramente me tenga que dejar bigote como la comunidad azteca, que entre ellos está de moda. El mostacho vuelve... O nunca se fue de el look de México. Y comentaron de qué coño me reía yo. Pues de ellos. Y de sus ‘chingadas’ y cosas raras.

Pero lo mejor fue el momento en el que se pusieron a hablar de la biblia relacionada con estos temas. Citaban de un modo errático partes de ‘Sodome y Gomorre’, hablaban del libre albedrío, de la promoción de los gays en la sociedad... Me encantó poder tener un momento tan fascinante escuchando a unos tipos hablar entre varias mesas a distancia sobre sus credos.

Lo más llamativo es que decían que todos los hombres son infieles y claro, eso es menos pecado que ser invertido. Con mujeres e hijos, hablaban de sus conquistas y uno de ellos invitó uno a la consumición a una jovencita. Como hacen en uno de los últimos capítulos emitidos de HIMYM.  Unos momentos surrealistas, muy cinematográficos, precisamente en el lugar donde saben hacerlo de manera industrial.

Fin de la primera historia del domingo 27 de enero de 2013.

Los mex desyayunando, garito abierto

lunes, 28 de enero de 2013

Americanadas

Autos de choque Play Boy (de goma inflada)

Del tipo que cambió Bilbao gracias al titanio, prismático.
Beer Pong, llegué, ví y vencí.
El elegante arte de crear matrículas personalizadas
Bicho blanco que pretendía ser navideño
Jukebox con la madre de Paquirrín

Mientras estoy inmerso en escribiros post más largos, os dejo estas fotos de americanadas varias.
Besos. Hasta la siguiente desde... Hollywood!

martes, 22 de enero de 2013

El autobús del terror I


Hombreñora (el último hit en travestismo angelino)
Una de las cosas más llamativas y terroríficas de Los Ángeles es su gran extensión. Es una ciudad de proporciones colosales con un tráfico denso y colapsado. Lo cual crea un monstruo... ¡Sus autobuses públicos!

Los pocos días que he estado aquí me han dado para contar historietas para largo, pequeñas, curiosas y de momento, ninguna peligrosa. No he podido sacar fotos de todos esos grandes momentos vividos en esas maravillas de la ingeniería mecánica que carecen de salubridad a cualquier hora del día.

TERROR ALCOHÓLICO

Una de las anécdotas más curiosas fue un día que entró un vagabundo borracho sucio y maloliente. Como no se tenía en pie (dudo que pagara el pasaje) le hicieron levantarse a otro tipo del asiento con aspecto normal, que se mostraba sobresaltado por el motivo. Este hombre ‘normal’ se sentó delante de mí.

Comenzó a hablar en alto sobre el otro demacrado. Luego pasó a comentar los carteles de publicidad de la calle. Desde qué tipo de cerveza era mejor, hasta la hamburguesa más grasienta, todo pasaba por su crítico paladar. Yo estornudé y en ese momento el hombre intentó interactuar conmigo. También con otros pasajeros que le ignoraban. Pasado un rato, cuando el otro individuo que le había quitado el sitio se bajó, empezó a hablar de su familia y que le habían echado de casa. El hombre de aspecto ‘normal’ iba limpio y llevaba un par de mochilas montañeras llenas de cosas. Entre sus utensilios sacó medio a escondidas una botellita de alcohol transparente. Yo juraría que era vodka, pero desgraciadamente, no tuve el valor/testículos/insensatez suficiente para preguntárselo a este buen hombre.

Sin embargo, después de la timidez inicial que había tenido con su botella-petaca, se puso a darle tragos a los ojos de todo el selecto pasaje. Si era un actor buscando trabajo por Hollywood, desde luego era un fenómeno. No creo que fuera agua lo que llevaba la botella por la cara de asco que ponía en cada trago. El hombre presuntamente alcohólico era muy majo. De hecho en un momento dado me ofreció la botella. No sé qué me hizo desechar la oferta, si el horario de las seis de la tarde, la poca gana de beber a morro, que el vodka estaba calentorro o simplemente que mi cuerpo no me pedía ese tipo de bebercio de garrafón sin dosificador.

Si en realidad, el problema de los americanos con la bebida es por el dosificador. Si lo pusieran, sabrían controlarse como hacen cada fin de semana los vascos en la parte antigua de sus ciudades, cuando orinan en las esquinas de edificios centenarios.

Volviendo al tema de mi ‘amigo’ estadounidense y compañero de transporte público, debo volver a señalar qe volví a estornudar y volvió a hacerme un “bleyu”. No sé cómo pudo echar la parienta de casa a un hombre tan educado.

Mi intención era contaros más historietas de bus, pero me he alargado. Así que lo dejo para otra ocasión.

Hasta la siguiente desde West Los Angeles!!

PD: Realmente ya sé que esta historia no da miedo. Pero siempre viene bien dar un poco de emoción al asunto. Habría sido más divertida si llego a beber el vodka y me hubiera convertido en un cyborg asesino. Pero no siempre la realidad supera a la ficción, al menos en California.




























domingo, 20 de enero de 2013

El transporte de personas, individuos, seres y viceversa en LA

Punto 1. Aquí no te consideran normal si no tienes coche. Alguna tara extrema tienes que tener para carecer de un bien de primera necesidad. Es como en España tener lavadora en casa. Conoceis a algun loco que no tenga?

Punto 2. Las distancias son increíbles. Bloques bajos y alejados. Densidad de población cero por metro cuadrado. Ultra ecológico.

Punto 3. Vida social cero. Calles peatonales menos 37. De puerta a puerta. De casa al trabajo. Del trabajo al súper. De casa al restaurante.

Punto 4. Odio a la gente que hace puntos.

Punto 5. La gasolina es barata. La contabilizan en galones 3,78 litros (a lo bestia). Es más barata que la cerveza. Podría ser un buen momento para cambiar los usos del bebercio.

Toda esta introducción es para comprender el siguiente y temido post: El autobús del terror, Miedo os debería dar sólo pensar en ello. En unos días... Aquí, en LAGONfidential.

¡Hasta la siguiente desde Estados Unidos de América!



lunes, 14 de enero de 2013

Un vitoriano en los Globos de Oro II (el largo)



Tras la breve introducción de ayer, hoy os relato más mierda sobre ¿la noche?, el día de los Globos de Oro.
El corrupto de OC

The Newsroom
Mi misión en esta alfombra roja, por dónde desfilan las celebridades, era sencilla: asistir en lo posible. Así pude estar liberado para sacar fotillos y tuitear (@Gonlpz) mientras pasaba esa horda de estrellas de la cultura occidental que tanto hemos mamado de manera ocular desde nuestra más tierna infancia.

Allí pude observar las diferentes técnicas para esquivar a la prensa, como ir corriendo por en medio. Si ves un tumulto de gente pasando a gran velocidad, en el medio siempre hay un artista conocido. Es divertido ver como se saludan y se besan todos los amiguetes de la industria. Como si quedaras con tus excompañeros de trabajo y de instituto y te pusieran a corretear cual mono de feria. Lo que los diferencia de los monos es que en lugar de plátanos, les dan champán gabacho.

Sinceramente, esperaba menos cordialidad entre compañeros de medios en la alfombra roja y más ‘salvaje’ la búsqueda del famoso. Seguramente, muchos de ellos saben que a lo largo de la noche, conseguirán hablar con muchos de los que desean, después de la ceremonia de entrega de los premios, en las múltiples mini alfombras rojas que organizan los diferentes macroestudios (HBO, Fox, Universal...)

Mi labor durante la apasionante entrega de galardones era esperar en un bar tomando algo. Orden de mi jefe, un premio durante una ceremonia de premios. Y me senté en la barra del bar del Beverly Hilton a tomar unos refrigerios. Allí conocí a un periodista colombiano de la CNN en español muy majo y a una americana borracha perdida, con los que hice buenas migas y disfruté de la velada. Con el comunicador aposté dos veces las consumiciones y perdí en ambas. La primera perdí con el corazón por culpa de mi ‘amiga´ de piernas enfermizas, la ‘Jataguay’ y la segunda porque pensaba que mi adorada Lena Dunham de Girls no iba a poder contra una Tina Fey que presentaba la gala y hace su última temporada con 30 Rock. Noche desdichada en el juego... Y en el amor... Digamos que mis ojos vieron mucho amor visual, sería un buen momento para que me los arrancaran y los pusieran en una urna con formol para el recuerdo. Demasiado enseñaban algunas para el frío que hacía.

LA BORRACHA AMERICANA

No diré su nombre. Era rubia y norteamericana. Y llevaba una buena melopea. Estaba con un par de amigos gays a su lado a los que apenas hacía caso. Hablaba con mi nuevo colega colombiano y conmigo sobre las series y las pelis. La tipa era la típica ‘facha’ tejana amante de Charlton Heston y de la asociación del rifle. Dicho de otro modo, se levantó emocionada cuando Bill Clinton (el marido de Hilary según las presentadoras), presentó la cinta Lincoln y mantenía la esperanza de que el panfleto demócrata de Aaron Sorkin (aunque me parece entretenida con toques de ciencia ficción) lograra algún globo, que se llevó la sobrevalorada Homeland. Además la muchacha enseñaba cada vez más pierna y parecía no tener ganas de volver a casa sola. Es curioso que bebía el vino (a precio de cojón de mico) como si fuera agua mineral del Mercadona. Entretenido hablar y discutir con ella sobre nuestras preferencias.


FAMOSOS

Había muchos (obviamente). Tantos que te perdías a la mayoría en cualquier momento, un tuit, una palabra, una mirada (qué romántico suena). Pero intentaré hacer memoria de todos los que pasaron.
La primera, que no se me olvidará en la vida, fue antes de la acreditación. Vi pasar a JLO con su marido hortera, sus hijos, toneladas de ropa y su chándal. Luego volví a ver a la muchacha con un vestido bastante fino que evidenciaba sus curvas de latina anoréxica. Y un novio de veintipocos con traje blanco que bien podría haber salido de Gandía Shore.

La ‘alta sociedad’ de Hollywood pasaba por los últimos metros a toda pastilla, cansados de tanta palabrería vacía y de mediocridad. Leonardo Dicaprio, Steven Spielberg o Michael J Fox a pesar de su enfermedad, pasaron como balas a un ritmo digno de ser visto en cualquier carrera popular keniata. A ese paso también atravesó la alfombra colorada una versión viejuna y canosa de Matt Leblanc que ha dejado de ser Joey Tibriani y se ha convertido en su propio padre.

El director de Amor, Michael Haneke, o los archiconocidos Mel Gibson, Tarantino, Bon Jovi, Jack Black, Nicole Kidman, Salma Hayek, Kevin Cosner, Tim Burton, Tom Hooper, Hugh Jackman, el tipo de Transporter con una rubia descomunal, Julianne Moore, Daniel Craig, Hellen Mirren, Quentin Tarantino e incluso al escocés más popular en la meca del cine occidental (Bollywood le da mil vueltas a esta mierda anglosajona), Ewan McGregor.

El más majo sin duda, J.A. Bayona. Al que confundimos en un primer momento con otro Bayona, su hermano gemelo, que le hacía de doble en alguna entrevista con televisiones suecas (esto me lo acabo de inventar). Está muy contento con el éxito de Lo imposible. Una gran producción rodada en los estudios de la Luz.

Pero lo peor de todo, es todos los que se me pasaron, he olvidado y olvidaré. Lo siento por ellos. Seguro que no pueden dormir en toda la noche pensando que o no les pude ver en persona o no los he mencionado.

SERIES

Como gran seriéfilo, la pequeña pantalla merece un apartado aparte. Me hizo mucha ilusión ver a Bryan Cranstron rapado con las gafas y la perilla de Heissenberg, así como a su petarda de mujer en la ficción. Disfruté observando como John Hamm brillaba con su percha  de galán. Don Draper tiene nombre y talento, atrae muchas miradas de admiración.

Uno de los elencos que estaban al completo era el de The Newsroom que tanto gustaba a mi amiga la borracha. Jeff Daniels, la rubia petarda, o la británica estaban dando la cara y hablando amablemente. Mi amada economista Olivia Munn, que con esas gafas se ve que sabe más que Bernanke y Draghi juntos, estaba muy guapa. Obviemos que hace de ramera en New Girl.

Otra serie que tenía a varios de sus componentes pululando, y sobre todo que pude ver, fue The Big Bang Theory. El indio, Blossom y el judío respondían amablemente sobre su sitcom friki a la prensa congregada. Además, también pude observar a la guapísima Zooey Deschanel de New Girl con un vestido rojo enseñando un escote pronunciado, así como al judío ciclado (por si no os habíais dado cuenta soy malísimo para nombres de personajes y/o personas).

También he visto a la entrenadora de Glee, a la Dreyfus de Veep y de Seinfield y a la presentadora Amy Phoeller que es una adorable pirada en Parks and Recreations. Debo mencionar además a John Goodman, de un tamaño como en Rosseane o Community,

MI VESTUARIO

Tanto glamour y tanto pijo puede producir arcadas en más de uno. Ante una posible cascada de vómito en cadena (puesto que el olor de la pota hace potar al de al lado), tengo que aclarar que para asistir había que ir en traje. Daba igual si era hortera o se llevaban zapatillas negras, pero el traje era más reglamentario que los polvorones en navidad. Yo tenía algunos elementos, excepto pantalones y corbata. Fui un poco intrépido al ir a la tienda de segunda mano al lado de casa. Pero allí por 16 dólares me pude vestir dando el pego (o eso han puesto los contactos en Facebook). Y con pantalones acortados con mi talla. Se ve que debe de haber un alma gemela mía en la ciudad.


PD: Siento la calidad de las fotos, pero están sacadas con mi iPhone retro y una cámara de color rosa que me 'regaló' de alguna manera una amable murciana. Es lo que hay. Ah y sé que la entrada I era alavés y esta es vitoriano. No es una errata.
Viva Bollywood
y las sitcom frikis
Famoso por Tin Cup y Waterworld
Bayona, Lo imposible es saber si está en
Francia o en Galicia
El amado Janeke

Un alavés en los Globos de Oro I




Argo y Miserables (GLH)
Este domingo he estado en el mítico hotel Beverly Hilton, dónde se han rodado infinidad de películas en su entrada en curva. Allí se ha celebrado un año más la mítica ceremonia de los Globos de Oro, (Golden Globes para los de la Logse que estudiaron algo de inglés) que reparte una asociación de periodistas extranjeros afincados en Hollywood. Por lo que se rumoreaba en la alfombra roja, son una panda de dinosaurios unidos en una secta en la que es difícil entrar y de la que van cayendo integrantes a gran velocidad.

Pretty Man,
el hombre que hace mojar el sofá a varias generaciones de hembras
La gala ha sido muy pronto. Como EEUU es un país de unas dimensiones bestiales, se hace a una hora decente para todo el país. Conclusión: empiezan a desfilar hacia las 3 de la tarde y para las 6 ya está todo el show en marcha. Pero a los pillos no les ha importado ponerse a copar botellitas de Moet Chandon que repartían gratis con un vasito pegado al morro para que se viera la marca. Una macarrada elegante (contrasentido lógico por ser publicidad y no se vería en una copa) que puso 'chispa' a los invitados a la gala.

Homeland tipa (GLH)
La mítica alfombra roja de la manida “antesala de los Óscar” son 100 metros de medios internacionales hacinados como sardinas con un metro de valla para cada uno. Los 'afortunados' que consiguen estar en los primeros metros consiguen a las estrellas frescas con ganas de hablar. Obviamente son los grandes medios norteamericanos que pagan pasta tienen los mejores sitios, y a lo largo de ese paseo también se ubican pequeños platós de teles que pagan incluso más y que consiguen tiempo en directo con los muñecos de la gran y pequeña pantalla. En dónde estaba yo situado pasaban a menudo de largo, ya era el final y les apetecía entrar. Sin embargo, las relaciones públicas de los desconocidos te ofrecen con cartelitos a la gente que no conoces. Es como: venga, dale una oportunidad, se ha duchado y puesto guapo para la ceremonia aunque no lo conozcan ni en su casa a la hora de desayunar.

Homeland barbudo (GLH)
Ha sido entretenido, apasionante y estoy bastante muerto. Prometo mañana ampliar con mi experiencia personal. Que no todos los días un tipo nacido en Txagorritxu está en unos Globos de Oro.

¡Hasta mañana desde Hollywood!

PD: Cuando me iba del hotel, me he cruzado con Stanley, el afroamericano vago cincuentón de The Office. Y ha suspirado fuerte. Como en la serie. Y he brincado como un niño el día de reyes. ¿Realmente he estado allí o me lo he inventado?

sábado, 12 de enero de 2013

Un mes en América


Ya ha pasado un mes desde que llegué a la tierra de las oportunidades. La verdad es que está siendo entretenido y un reto constante día a día. Hacer balance ahora es un poco prematuro (como los bebés de incubadora, como yo fui, que iba a ser retrasadico según decían los médicos, que acertaron de pleno) pero no me puedo quejar. A ver si los meses que quedan son tan divertidos y variados como han sido esta mitad de diciembre y de enero.

LOS CHECK DEL MES

Ricas y veganas
Ir a un supermercado tocho rollo Walmarkt. He estado en el Costco. Increíble. Es una especie de Macro en dónde te venden cosas enormes. Divertidísimo. Increíble. Camisas de Calvin Klein originales a 20 pavos.

Cocinar comida española: Lentejas vegetarianas. Ricas.

Asistir a una fiesta con vasos rojos (universitaria o no). A dos. Una en nochebuena que os relaté y otra en nochevieja. En la segunda jugué por primera vez al beerpong (CHECK NUEVO) y les gané a los americanos en su propio juego. Como ganar a los ingleses al fútbol, pero más difícil.

¿Alguien quiere jugar conmigo?
Encontrar un mercadillo casero de cosas de segunda mano en un jardín: compré una batidora americana, sí americana en América! No digo el precio porque me da vergüenza. Le pregunté el origen a la familia que lo vendía, y sólo puedo deciros que se produce mucho opio en la zona.

Comprar algo en un sitio de cosas de segunda mano auténtico (no una mierda de Cash Converters) Un juego de Trivial de los Soprano, un pantalón y una corbata. Muy barato. Además, ya tengo fichadas cosas para amueblar mi hogar.

NUEVOS MUST

Desayuno típico americano en un restaurante (CHECK)
Ir a una ceremonia de entrega de premios (algo me huele que mañana haré un check en toda regla en el Beverly Hilton, algo os contaré esta semana)
Surfear
Jugar al póker con billetes en la mesa
Invitar a mis compañeros de curro a donuts de colores
Reto dietético
Tomar un fressysuis en un 7/11
Ir a una noche de terror en el cementerio
Asistir a un encuentro de gente desconocida (CHECK)
Cenar a las seis de la tarde (CHECK)
Ir a pescar a la casa de un lago
Cazar un ciervo con un colega con bigote
Comer malvaviscos en una hoguera
Ver los fuegos artificiales el 4 de julio
Celebrar el año nuevo chino
Ir a una convención del cómic/estreno disfrazado
Jugar al ajedrez en un parque con señores mayores
Comer en un restaurante y lograr un reto para que pongan tu foto en la pared (localizado y asequible)

¡Hasta la siguiente desde Los Ángeles!

miércoles, 9 de enero de 2013

Las bebidas americanas guarras I


Viendo el éxito de las guarras, he decidido seguir con ese apasionante mundo turbio, lleno de fango y de los bajos fondos. 2013 podría ser un año apasionante para LA GONfidential, aunque se haya vuelto cerdo. Hoy hablaré de la bebida GUARRA. Con mayúsculas

¿Yo? Sólo tomo limonada rosa.
Las bebidas en la primera potencia mundial son todo un mundo por descubrir. Bueno, todo por descubrir no son exactamente. Se rumorea que han llegado al viejo continente algunas marcas de EEUU como Coca Cola, Pepsi, Fanta o 7 Up. El Kas, como bien sabe la audiencia es alavés.

El tópico de que los americanos beben cosas muy raras es totalmente cierto. En el post de hoy sólo voy a comentar algunos de los líquidos que más me han llamado en estas casi cuatro semanas. Aquí en lugar de preguntarte qué sabor o bebida es tu favorita, te preguntan cuál es tu colorante favorito y tu mezcla más apreciada.

Si ponéis bote, me atrevo a probarlo...

Si la Cocacola te parece dulce, probarás la Coca Cola con Vainilla. Si te gustan los Mon Cherí, probarás la Cherry Coke zero o la 7 Up Diet Cherry. ¿Que encuentras que los limonada tiene que ser rosa? ¡Toma limonada rosa! Estas fantásticas combinaciones sólo pueden explicarse de la siguiente manera: droga. Los directivos de marketing de las grandes corporaciones son unos jodidos yonkis. No hay cabeza humana que se explique eso. Pero lo peor es que filtran parte de esos estupefacientes en las bebidas. El otro día, comiendo fuera con compañeros de la empresa, uno estuvo seriamente pedirse un batido, ¡de cocacola avainillada! Insisto, única explicación posible, los psicotrópicos y mierdas ilegales en gran parte del mundo, que toman esos creativos. O que fueron a Afganistán y les rociaron las papilas gustativas con ácido. Pero parece poco verosímil.
No está mala esta mierda.

De todos modos, quizá nos parecemos un poco a ellos en el tema las bebidas guarras y hacer combinaciones extrañas. ¿A quién más se le iba a ocurrir mezclar el vino con la cola? Sí, esa bebida isotónica (que beben niños, atletas y ancianos), cuyo misterio radica en mezclar sus ingredientes en unas mágicas proporciones con precisión de cirujano. O la cantidad de chupitos de colores y densidades varias que copan las barras de los bares repletos de juventud y olor a humanidad con música alta. (menuda reflexión de la tierra patria me sale a 9.000 km...)

El Mon Cherí bebible
A pesar de que a los americanos les puede sobrar algún que otro kilito de más, también se cuidan. Bebidas light a cascoporro. Light de todas las mezclas extravagantes que se inventan. Pero claro, ellos a la Cocacola light no la llaman así. ¡¡La llaman Diet!! De dieta... Y sabe peor que la que se embotella en Europa. Pero en general la beben de grifo, ese aguachirri que les permite rellenar infinitas veces en la mayoría de los sitios, que conocemos bien por algunas franquicias americanas afincadas en la península.

En definitiva estos tipos son como David de Jorge pero en sociedad. Unos guarrindongados no sólo de viernes, sino de toda la semana completa, incluidos festivos de guardar. Os dejo con unas cuantas fotos tomadas por mí de esos brebajes, que bien podría haber tomado Obélix en la marmita que le dio los superpoderes de por vida.


¡¡Hasta la siguiente desde California!!
Al menos no engorda...



Putas en Hollywood

Rameras afincadas en EEUU
No, a pesar de lo que pone el títulono me he ido en búsqueda de prostitutas por Hollywood. Ni tampoco tengo intención. Pero como he visto que en los últimos post ha decaído el impacto en la audiencia, he decidido hacer como en los periódicos amarillos, un título morboso que siempre atrae visitas. Si veo que este giro da muchas visitas, me temo que tendré que cambiar mis hábitos y frecuentar burdeles o salas de espectáculos. Si hay que hacerlo por el bien de la humanidad, me sacrificaré por unas míseras visitas (que den comentarios, que los existentes lo agradezco mucho desde la distancia).

Como tampoco deseo mentir a mis lectores, os voy a poner algo relacionado con el título para no faltar a la verdad. Muchachas de vida licenciosa, rameras o simplemente como dice el eufemismo, trabajadoras de la noche. ¿La profesión más antigua del mundo? Seguramente la profesión más antigua era la de cazador o la de guerrero.

Ahí van fotos de putillas hollywoodienses de un diario gratuito rollo guía del ocio. O como quieran que se llamen las guarrillas de la zona.

Porros 'medicinales'
Además en el mismo diario también hay anuncios de médicos con licencia que te recetan la marihuana con fines terapéuticos. Aquí lo de los porros te los receta alguien queha estudiado una carrera y no un dromedario venido del Magreb. Loscalifornianos pagan y fuman. Con hipocresía, como en todos lados. De hecho, buscando piso en varios de los anuncios entre otros requisitos como que te gusten los animales o ser 'gayfriendly', te piden queseas defensor de la ley que deseaba que se legalizara el consumo con un fin recreativo.

Todavía no es legal, pero tienen cajeros de porros. Como los normales, con papel y material, pero con THC añadido. Y luego dicen de Holanda...